Espejito, espejito ¿quién es la más bella del reino?

   La madrasta de Blancanieves se deleitaba frente a su espejo mágico, y no tengo duda que éste era una pieza excepcional, de esas que se encuentran en ocasiones únicas.

   Al ver el espejo que os muestro a continuación, supe por qué la madrastra se sentía la más bella del reino...

  Una pieza con más de ochenta años... que ha sobrevivido al paso del tiempo. ¿Cuántas miradas habrá reflejado? ¿Cuántos manos se habrán deslizado sobre él desde que se fabricó? ¿Qué podría decir de todo lo que ha visto... si hablase?

   Serían tantas las historias que podría contar de cada instante que ha vivido... mas no va a hacerlo. Leal como la amistad, guardará silencio hasta el fin de sus días de todo aquello que ve...

   Su forma, su edad... toda la belleza de sus matices, hacen que sea una pieza absolutamente exclusiva, muy especial.
   Ha llegado al desván para curar las huellas que le ha dejado la vida, para brillar como antaño, y reflejar toda la belleza... por siempre jamás.